La Temporada 2015-2016 dio ayer su pistoletazo de salida de la mejor forma posible, con la disputa del primer título, la Supercopa de España, entre los dos conjuntos punteros del balonmano nacional femenino, los vigentes campeones de la Copa de la Reina, el Rocasa Gran Canaria, y el campeón de las últimas tres ediciones de la División de Honor Femenina, el Balonmano Bera Bera.
Antes de la disputa de este partido, disputado el pasado sábado, el equipo guipuzcoano partía con una leve ventaja al contar con el factor campo, tras la decisión de Real Federación Española de Balonmano de fijar la sede de este partido en el Pabellón Josean Gaska de Donostia-San Sebastián.
Y el Bera Bera hizo buenos los pronósticos, si bien tuvo que hacer frente a la resistencia a la derrota del combinado grancanario, que no se rindió hasta el pitido final.
Se pronosticaba en la previa un duelo más goleador que el habitual entre estos dos equipos debido a la salida de piezas clave en la defensa de Bera Bera, pero nada más lejos de la realidad, ya que el partido comenzó con dos goles consecutivos de Eli Pinedo desde la línea de siete metros sirvieron para abrir la primera diferencia en el electrónico (4-1 min. 8).
Sin opciones en ataque posicional, tuvo que ser un contraataque y un lanzamiento desde su propio campo, al ver adelantada a Ana Temprano, lo que permitiera a las grancanarias mantenerse en el partido cuando se alcanzaba el ecuador de la primera mitad.
En el último tramo del primer acto, las exclusiones de Alicia Fernández y Ana Isabel Martínez no hicieron mella en las donostiarras ante un Rocasa empeñado en atacar por una zona central perfectamente bloqueada por las locales. Y así, con la defensa a pleno rendimiento y una efectividad total desde los siete metros, las de Montse Puche alcanzaron el descanso con tres tantos de renta (9-6).
Tras el paso por vestuarios, tenía que apretar los dientes Rocasa Gran Canaria y lo hizo encontrando, por fin, a Yacaira Tejeda en el pivote para reducir a la mínima expresión su desventaja y provocar el tiempo muerto de la preparadora local (14-13 min. 52).
La arenga de Montse Puche tuvo efecto y sus pupilas lograron un parcial de 3-0, con una providencial Ana Temprano bajo palos, que sirvió para restablecer la diferencia de tres tantos cuando restaban solo cinco minutos para el final del partido.
El cambio defensivo a 5:1 y el empuje de María Luján sirvió a Rocasa Gran Canaria para dejar el resultado final en un ajustado 18-17, pero no para evitar que Bera Bera se proclamara campeón.
De este modo, el Balonmano Bera Bera consiguió alzarse con su cuarta Supercopa de España consecutiva, la quinta en su palmarés, asestando además el primer golpe anímico y psicológico en una temporada que promete estar llena de emociones fuertes, por la creciente rivalidad entre estos dos equipos, que tendrán que verse las caras tanto en la División de Honor como en la Copa de la Reina, e incluso puede que en competiciones europeas.
