El jugador argentino de 25 años Diego Simonet (1,90 m., 80 kg.), considerado uno de los mejores de la generación actual de profesionales del balonmano en su país, ha firmado ya su último partido en 2015. Una terrible lesión el pasado fin de semana le obliga a retirarse para una rehabilitación que no terminará, como mínimo, hasta enero de 2016.
Diego se ha lesionado la mano derecha y los primeros partes médicos sitúan la gravedad de la lesión hasta el punto de que no podrá volver a las pistas a jugar con su actual equipo, el Montpellier Agglomération Handball francés, al menos de entre 4 a 6 semanas.
El diagnóstico concreto identifica la lesión como una luxación abierta ocasionada en la falange distal del cuarto dedo de la mano derecha. Además, el diagnóstico también reconoce que la lesión ha tenido efecto sobre el tendón, que llegó a requerir el pasado lunes 23 de noviembre la realización de una sutura para permitir su recuperación.
Las consecuencias deportivas de esta lesión son importantes. El jugador argentino era una baza de vital importancia en su posición tanto de lateral izquierdo como de central. Y ahora se quedará fuera de la Champions, de la siempre atractiva Liga de las Estrellas de Francia y de varios partidos de la LNH (Liga Francesa de Balonmano), en los que el Montpellier se enfrentará a equipos como el Toulouse, el Creteil, el Ivry o el Cesson.
Diego Simonet pertenece a la que se conoce como selección de oro en Argentina, por el demostrado talento ofrecido en las más recientes competiciones internacionales, pese a que el deporte del balonmano todavía se está ganando su reconocimiento en el país sudamericano.
Entre los principales logros de Diego con la selección argentina destaca la reciente medalla de plata en los Juegos Panamericanos de 2015 y la medalla de oro en los de Guadalajuara de 2011.